En más de 6 años gestionando redes sociales médicas de manera profesional he visto de todo, repito, de TODO. Pero los casos más vistosos son cuando asumen que el entorno Social Media puede manejarlo cualquier aficionado y representarlo de manera profesional. No basta con colocar una foto bonita o sólo publicar promociones sin contenidos de valor para el público. Si no tienes objetivos claros y una estrategia a largo plazo, las redes sociales pueden perjudicar la imagen misma de la marca médica.

Es en este escenario donde aparecen los “Sobrinity Manager del Marketing Médico”, jóvenes con mucho entusiasmo; pero, sin experiencia, que en muchos casos tienen una relación casi sanguínea con los dueños de las entidades médicas. Así como personas que piensan que pueden manejar redes sociales de una clínica o consultorio médico de la misma manera como manejan cuentas de restaurantes, discotecas o zapatos, que equivocados están.

Las redes sociales médicas ameritan una especialización, criterio para responder al público (representan a un médico) y tener bien claro los aspectos legales que conllevan el intentar desde su inocencia profesional responder una consulta médica on line sin ser un profesional de la salud: “Señores las consultas médicas se responden en un consultorio, para eso un médico estudio más de 12 años, la salud de las personas no es un juego”.

Las empresas y profesionales de la salud deben entender que sus futuros pacientes no solo buscan una promoción o la foto de portada del médico todos los días, ellos le dan like a tu página porque desean tener consejos de salud, que les aclaren temas sobre enfermedades, entender que es la mejor oportunidad de ser líderes de opinión en la especialidad médica que dominan.

En Médica-Marketing Médico nos enfocamos en una estrategia definida de contenidos, técnicas probadas de venta en redes sociales y criterios de respuesta coherentes frente a casos peculiares que sólo el rubro médico tiene. Confía tu marca médica sólo a profesionales especializados en tu rubro de salud, mucho cuidado con los “Sobrinity Manager del Marketing Médico”